Nos encontramos en un momento decisivo para la telemedicina (también conocida como telesalud). Durante cientos de años, las interacciones entre los médicos y los pacientes han sido principalmente cara a cara en las consultas médicas, los hospitales, los hogares y los centros de atención. Pero hoy en día, la tecnología médica y las redes más rápidas como 4G LTE y 5G están cambiando la cara de la asistencia sanitaria.
Las tecnologías de telemedicina han ido progresando gradualmente. Lo más notable ha sido el aumento de los dispositivos sanitarios portátiles para controlar las constantes vitales. La idea de que los médicos vean a los pacientes a través de Internet ha sido atractiva, pero no se ha puesto en práctica.
Sin embargo, la pandemia de COVID-19 ha cambiado eso. Para mantener la seguridad de los pacientes y del personal médico, las organizaciones sanitarias utilizan cada vez más la tecnología de telesalud para atender a los pacientes. Como resultado, el crecimiento del mercado de la telemedicina se está acelerando en todo el mundo. Las empresas de dispositivos médicos se apresuran a satisfacer la demanda. Además, las actuales tecnologías inalámbricas 4G LTE y 5G en evolución están impulsando el crecimiento de la telesalud y otras funciones sanitarias como nunca antes. Algunos de los factores tecnológicos que contribuyen a ello son la generalización de
disponibilidad de la red celular,
facilidad y rapidez de despliegue y ampliamente
mejora del ancho de banda.
La tecnología de nueva radio (NR) 5G supone una importante mejora con respecto a la actual tecnología 4G LTE. Utilizando el espectro de ondas milimétricas (mmWave), la 5G puede ofrecer una velocidad de descarga teórica de 20 gigabits por segundo, frente a los menos de dos gigabits por segundo de LTE. Esta mejora de rendimiento de 10 veces significa más y mejor información en tiempo casi real.
La onda milimétrica 5G utiliza frecuencias muy altas, entre 24 GHz y 100 GHz, capaces de ofrecer altas velocidades de datos, pero a una distancia mucho menor que LTE. Por tanto, se necesitan más torres de antena 5G. Actualmente, proveedores de infraestructuras móviles como Nokia o Ericsson ya son capaces de demostrar velocidades de descarga 5G de hasta 10 gigabits por segundo.
Por su supervelocidad y robustez, el 5G acelerará el desarrollo de la telesalud. Pero hay más. El 5G también puede dar soporte a la Internet de las Cosas (IoT) y a la infraestructura de las ciudades inteligentes. Como resultado, impulsará el crecimiento de la asistencia sanitaria a domicilio, la monitorización remota de pacientes, la asistencia quirúrgica remota y robótica y la infraestructura de ciudades inteligentes. Tanto los pacientes como las personas sanas verán un impacto directo en su bienestar y en los recursos disponibles para la gestión de la salud.
Mejora de la asistencia sanitaria a domicilio
El envejecimiento de la población está creando una demanda de asistencia sanitaria a domicilio. Aunque es más cómodo quedarse o recuperarse en casa, hay problemas de seguridad cuando un paciente externo o una persona mayor viven solos. Los hijos adultos pueden vivir a muchos kilómetros de distancia y no tener fácil acceso a sus padres. Esto crea un dilema. Por un lado, la persona o personas mayores preferirían tener la libertad de vivir solas. Por otro lado, a los hijos les puede resultar difícil proporcionar los cuidados necesarios para mantener a uno o varios padres que viven solos y les preocupa que no se satisfagan sus necesidades de salud y seguridad. Afortunadamente, la tecnología de asistencia sanitaria a domicilio podrá resolver el problema.
People Power, una empresa tecnológica con sede en Palo Alto, se ha asociado con la Universidad de California en Berkeley para idear la teleasistencia basada en la IA (THC). Basado en la inteligencia artificial (IA) y la computación en la nube, "People Power Family Care" puede supervisar las actividades de las personas las 24 horas del día con un equipo de asistencia a distancia para controlar su bienestar.
En comparación con otras soluciones disponibles en el mercado, este enfoque que utiliza la IA es mucho más avanzado. Por ejemplo, además de enviar una alerta de emergencia si los sensores de movimiento detectan una caída, el sistema también puede enviar alertas de aviso si el sistema predice que pueda producirse una caída. People Power Family Care consiste en un botón de asistencia personal y una red de seguimiento de la actividad en el hogar basada en la IA. Opcionalmente, es compatible con el Apple Watch para el seguimiento exterior y con Amazon Alexa para las comunicaciones de voz.
Los algoritmos de IA aprenden automáticamente el comportamiento de la persona o personas vigiladas. Si hay alguna actividad que cause preocupación, el sistema puede alertar automáticamente a un Círculo de Confianza de familiares y amigos, así como a un centro de llamadas de emergencia 24/7. Para evitar las desconexiones, el sistema incluye una batería de reserva y, en la actualidad, utiliza tarjetas SIM dobles de varios operadores, como AT&T, T-Mobile o Verizon, así como Wi-Fi.
A medida que la tecnología avanza de 4G LTE a 5G, se espera que una sola conexión 5G sea suficiente para la comunicación. Por lo tanto, cada vez más soluciones de asistencia sanitaria a domicilio como esta podrían conectarse utilizando solo el 5G en lugar de utilizar dos portadoras, lo que reduciría el coste y la complejidad.
Monitorización remota de pacientes
La electrónica médica ha avanzado mucho en los últimos años. Maxim Integrated, fabricante de semiconductores, ofrece una plataforma de silicio para los fabricantes de dispositivos que diseñan productos para controlar las constantes vitales más comunes. Entre ellas, el pulso/la frecuencia cardíaca, el oxígeno en sangre (SpO2), el estrés, el electrocardiograma (EKG/ECG), la temperatura corporal y la luz UV (exposición de la piel). Un nuevo reloj inteligente de Apple, el Series 6, puede monitorizar el oxígeno en sangre y el ECG con GPS y móvil integrados. Fitbit ha presentado su reloj inteligente Sense, que puede controlar el oxígeno en sangre, el ECG, la temperatura de la piel y el estrés con una conexión Wi-Fi.
Para reducir los costes sanitarios, los hospitales intentan dar el alta a los pacientes, como los que se recuperan de un infarto, lo antes posible, una vez estabilizado su estado. Tras el alta, los hospitales utilizarán tecnología inalámbrica para controlar a distancia el estado de salud de los pacientes. Los relojes inteligentes son útiles para controlar con frecuencia el estado de salud del usuario, pero aún no alcanzan el nivel necesario para su uso clínico.
Con sede en Charlottesville (Virginia), Caretaker Medical, una empresa de dispositivos médicos con inversiones de Philips y otros, ofrece el dispositivo Caretaker 4. La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) ha emitido una autorización 510(k) para la unidad. El Caretaker 4 proporciona una presión arterial continua no invasiva "latido a latido" ("CNIBP") y un monitor de frecuencia cardíaca, utilizando una tecnología patentada de manguito para el dedo. Con este dispositivo, el paciente puede ser monitorizado las 24 horas del día de forma remota por los cuidadores y/o familiares. En el futuro, el 5G proporcionará una conexión sólida y en tiempo real en un futuro próximo. Más pacientes podrán recibir monitorización a distancia a través de una conexión fiable.
Asistencia quirúrgica a distancia con tecnología 5G
Aunque la mayoría de los hospitales cuentan con cirujanos experimentados, no suelen tener todas las especialidades quirúrgicas en plantilla. A menudo, consultan a médicos con conocimientos especializados. Los expertos en campos quirúrgicos específicos han estado utilizando el vídeo y el audio para apoyar al equipo quirúrgico durante la operación.
Con los avances médicos, cada vez más cirugías dependen de la tecnología. Por ejemplo, un pequeño microscopio quirúrgico puede introducirse en el interior del cuerpo y, mediante una pantalla 4K de alta definición como la del Olympus Visera, revelar con claridad los detalles de la zona a operar.
Una conexión 5G permitirá que la misma información que ve el equipo quirúrgico pueda ser transmitida en tiempo real al equipo de expertos de apoyo y, en el futuro, con una resolución aún mayor de 8K. Esta conexión en tiempo real permitirá a los expertos asesorar al equipo mientras se realiza la cirugía.
Mejor apoyo a las emergencias en una ciudad inteligente 5G
Durante la pandemia, muchos hospitales se vieron desbordados debido a Covid-19. En algunos casos, los hospitales tuvieron que rechazar pacientes por falta de espacio en la UCI. No poder admitir a un paciente en una UCI con prontitud pone en peligro a los pacientes y altera las rutinas normales del hospital.
Algunas ciudades han empezado a experimentar con las tecnologías de las ciudades inteligentes para mejorar la asistencia sanitaria. En una ciudad inteligente, después de que una ambulancia recoja a un paciente que necesita atención urgente, se informaría automáticamente a un hospital cercano sobre el estado del paciente y la hora estimada de llegada.
Esa información permitiría al equipo de emergencias del hospital prepararse rápidamente. Si no hay una cama de UCI disponible, se habría avisado a la ambulancia, y el sistema la dirigiría automáticamente al siguiente hospital disponible sin detenerse. Si se instalan historias clínicas electrónicas (HCE), el hospital conocería el estado del paciente antes de su llegada y tendría preparada la configuración médica adecuada. Al conocer de antemano la información sobre cualquier alergia a los medicamentos o materiales, el equipo médico puede prepararse con menos apuros de última hora.
Además, en una ciudad inteligente, la ambulancia es guiada a través del tráfico mediante el envío asistido por ordenador (CAD) y la localización avanzada de vehículos (AVL). Semáforos inteligentes: hoy controlados con 4G LTE control de tráfico adaptativo y, en última instancia, controlado por el 5G- se sincronizarán automáticamente para permitir el paso de la ambulancia mientras se detiene el resto del tráfico, ahorrando tiempo y aumentando la seguridad.
El futuro del 5G y la tecnología médica
Sólo estamos viendo un atisbo de lo que el 5G podrá hacer por la telesalud y la asistencia sanitaria. Mejorará la atención sanitaria a domicilio y la monitorización de pacientes y cirugías a distancia. En las ciudades inteligentes, el 5G mejorará la forma de gestionar las emergencias. La información crítica, disponible casi en tiempo real, permitirá a los equipos reaccionar mucho más rápidamente para ofrecer una mejor atención.
De cara al futuro, se espera que muchas de estas decisiones y funciones puedan realizarse con IA. El aprendizaje automático, la IA y la robótica desempeñarán un papel más importante en los procedimientos para mejorar la precisión. Y los cuidadores y los equipos de emergencias tendrán más tiempo y estarán mejor preparados para hacer frente a situaciones inesperadas causadas por enfermedades o accidentes, así como por catástrofes naturales.
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